¿Te cuesta mantenerte motivado últimamente? No estás solo. Debido a la crisis de la COVID-19, el teletrabajo se ha convertido en la norma, y cada vez es más difícil separar la vida personal de la profesional. Los espacios habitualmente reservados para comer o dormir se han convertido en el nuevo lugar de trabajo para muchos. Al mismo tiempo, los responsables de los equipos se esfuerzan por aumentar la moral de los empleados en un contexto marcado por las reuniones de Zoom y los lugares de reunión virtuales.
Para mantener la productividad en este nuevo entorno, debes plantearte hacer pequeños ajustes en tu rutina diaria. Pero, ¿qué entendemos por seguimiento de la productividad? ¿De qué sirve? Hay muchos consejos de productividad que puedes probar, como descansos frecuentes del correo electrónico y listas de reproducción ambientales. Sin embargo, una de las mejores soluciones es también una de las más simples: llevar un diario de productividad.
Los beneficios de llevar un diario de productividad
Las personas que llevan un diario están convencidas de sus beneficios. Una vez que aprendes a llevar un diario, es difícil que abandones esta práctica. El motivo es que se trata de una herramienta excelente para ayudarte a:
- organizar tus ideas;
- definir tus objetivos;
- expresar tus emociones;
- llevar un registro de tu progreso;
- reflexionar sobre experiencias pasadas.
Sin duda, llevar un diario puede ayudarte a ser más productivo. Se trata sobre todo de un ejercicio de intercambio de ideas, planificación, seguimiento y análisis de tus actividades, y todas estas competencias son esenciales para mejorar la productividad en el trabajo. Este ejercicio puede ser muy beneficioso si te cuesta trabajar desde casa ya que te ofrece esta motivación adicional que tanto necesitas.
Cómo escribir un diario de productividad
¿Qué debes escribir exactamente en tu diario de productividad? La buena noticia es que puedes escribir lo que quieras. Cada persona es única y tendrá diferentes formas de lograr resultados.
Sin embargo, algunas actividades pueden ayudarte a llevar el diario de productividad:
Lleva un registro de tus objetivos en el diario
Apuntar los objetivos puede tener un impacto fortísimo en tu capacidad para lograrlos. Un estudio de la Dominican University ha revelado que los estudiantes que apuntan sus objetivos tienen una tasa de éxito mucho más alta que los que no lo hacen. El acto de escribir te hace plantearte cuáles son tus objetivos en primer lugar. También es una forma de hacer un pacto contigo mismo: piensa en tu lista de objetivos como un contrato escrito. Ahora que estos objetivos figuran en tu diario de productividad, debes encontrar la manera de alcanzarlos.
Utiliza tu diario de productividad para hacer listas de tareas pendientes
Un diario es un excelente lugar para apuntar listas de las tareas más inmediatas. Tal vez estés a punto de graduarte en la universidad y tengas que escribir una lista de ensayos. Tal vez estés buscando un nuevo trabajo y tengas que actualizar el currículum. O quizás estés pensando en iniciar un blog y tengas una lista de cosas por hacer antes de comenzar. Sea cual sea tu objetivo, apuntar estas tareas en un diario de productividad puede ayudarte a efectuarlas.
Analízate en tu diario
Cuando lleves cierto tiempo escribiendo el diario, puedes comenzar a analizar tu forma de trabajar y qué podrías hacer para mejorar. ¿Por qué no anotar tus ideas en cuanto a productividad? Considera las siguientes preguntas:
- ¿Qué tareas has realizado?
- ¿Cuánto tiempo has tardado en hacerlas?
- ¿Qué tareas siguen en tu lista?
- ¿Qué está ralentizando tu productividad?
- ¿Qué la aumenta?
- ¿En qué momento del día eres más productivo?
- ¿En qué momento del día eres menos productivo?
- ¿Cuál es tu definición de «horas productivas»?
- ¿Duermes lo suficiente?
- ¿Comes bien?
- ¿Estás estresado? ¿Qué causa tu estrés?
- ¿Cómo puedes estructurar tu diario de productividad?
Al reservar tiempo para analizar las diferentes partes que componen tu día, puedes eliminar los hábitos que no te funcionan y aprovechar los que sí lo hacen. Este ejercicio puede contribuir a una mejora de la gestión de proyectos, tanto en tu vida personal como laboral.
Utiliza tu diario para desahogarte
Todos tenemos días malos. Y, la mayoría de las veces, un mal día también significa falta de concentración y baja productividad. Pero, ¿y si tienes una fecha límite inminente? Saca de ti los pensamientos negativos escribiéndolos en tu diario de productividad. Si te sientes triste, frustrado o abrumado, tener una salida para expresarte puede resultar terapéutico. La mayoría de la gente se siente mucho mejor cuando les da salida a sus emociones.
Escribir tus emociones también puede servir para que no las descargues en otra persona. La falta de contacto cara a cara producto del teletrabajo hace que los problemas se intensifiquen con más probabilidad, ya que los mensajes pueden llegar sin rodeos. En lugar de enviar tus frustraciones por correo electrónico, anótalas en tu diario de trabajo. Una vez que las anotes, notarás más claridad en tu cabeza y podrás continuar con tu día.
Citas y frases inspiradoras para el diario
Todo el mundo necesita inspiración. Podrías reservar un espacio en tu diario de productividad para anotar palabras o frases que te inspiren. A algunas personas les gusta escribir intenciones o afirmaciones, como:
- Soy una persona inteligente y capaz
- Soy una persona encantadora
- Vivo una vida de paz y armonía
- Soy una fuerza positiva en mi entorno profesional
Otros optan por anotar citas de gente que admiran, que extraen de discursos célebres o de sus libros favoritos. Cualquiera que sea la forma que tome tu inspiración, un diario puede ser un lugar fantástico para guardar estas joyas de pensamientos. Leer frases inspiradoras por la mañana puede marcar el tono para un día productivo.
Cómo mantener un diario de trabajo actualizado
Como ha demostrado este nuevo período de trabajo flexible, muchos empleados han tenido que repensar sus prácticas diarias. Es posible que muchas variables hayan cambiado en tu vida laboral, lo que te ha hecho perder de vista tus objetivos profesionales. Mantener tu diario de trabajo actualizado te ayudará a volver a centrarte.
Aquí van algunos consejos para ayudarte a llevar al día tu diario de productividad:
Escribe el diario en formato digital
Sin duda, las aplicaciones nos han facilitado la vida laboral. Si la página en blanco de tu cuaderno no te inspira, ¿por qué no pruebas con un diario digital? Las aplicaciones de diarios digitales te permiten cargar fotos, vídeos y otros materiales, lo que proporciona una panorámica más visual de tus actividades. Puedes sincronizar tus actualizaciones desde cualquier dispositivo en el que estés trabajando, ya sea desde tu escritorio o en una cafetería; se trata de una función ideal cuando trabajamos a distancia. Con un diario digital, tus notas están siempre a mano, lo que te permite llevar un seguimiento de tu productividad en todo momento.
Escribe tu diario todos los días
Cuanto más tiempo pases sin escribir en tu diario de productividad, más difícil te resultará volver a retomarlo. Incluso si sientes que no tienes mucho que decir, escribir algunas líneas todos los días mantendrá tus notas actualizadas. También te ayudará a mantener una sensación de rutina que podrías estar perdiendo si no vas a la oficina todos los días.
Utiliza tu diario como referencia
Una parte particularmente gratificante de llevar un diario de productividad es volver atrás y leerlo después de que haya pasado un tiempo. Es una ocasión para ver cómo has evolucionado, qué problemas persisten y qué problemas has resuelto. Con el tiempo, tus objetivos pueden cambiar, por lo que es bueno consultarlos con frecuencia y actualizarlos en consecuencia. De esa manera, te mantienes centrado en tus prioridades actuales.
¿Quién debe leer tu diario de productividad?
Eso lo decides tú. Algunas personas pueden optar por mostrar su diario de trabajo a sus compañeros para realizar un seguimiento de los proyectos en grupo de forma colaborativa. Otros pueden simplemente desear compartir la alegría de los éxitos profesionales y recordar los logros del pasado.
Sin embargo, es importante recordar que el propósito de tu diario de trabajo es mejorar tu productividad personal. En este aspecto puedes ser completamente honesto acerca de tus pensamientos, metas, emociones, progreso y experiencias diarias. Esta valiosa información sobre tu forma de trabajar te ayudará a identificar tus fortalezas y debilidades y, en última instancia, aumentará tus niveles de productividad. Si la opinión de tus compañeros puede llevarte a no escribir algunos de tus pensamientos, entonces tal vez solo tú deberías ver tu diario. Hay muchos canales a través de los cuales puedes comunicarte con los miembros del equipo, por eso, no es necesario que compartas tu diario de productividad.
Ahora que sabes cómo escribir un diario de productividad, ¿por qué no intentarlo? Un diario de trabajo podría ser el empujón de motivación que has estado buscando en tu carrera profesional.
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